Que exhorta a los gobiernos estatales a trabajar de manera coordinada con el Gobierno Federal en el año 2013 contra la hipertensión arterial, dentro del marco del Día Mundial de la Salud. (16-04-13)

 

PROPOSICIONES
 
De los Senadores María Elena Barrera Tapia, Miguel Romo Medina, Cristina Díaz Salazar, Hilda Esthela Flores Escalera y Armando Neyra Chávez, integrantes de la Comisión de Salud, la que contiene punto de acuerdo que exhorta a los gobiernos estatales a trabajar de manera coordinada con el Gobierno Federal en el año 2013 contra la hipertensión arterial, dentro del marco del Día Mundial de la Salud.

SE TURNÓ A LA COMISIÓN DE SALUD.

PROPOSICIÓN CON PUNTO DE ACUERDO POR EL QUE SE EXHORTA RESPETUOSAMENTE A LOS GOBIERNOS ESTATALES A TRABAJAR DE MANERA COORDINADA CON EL GOBIERNO FEDERAL EN EL AÑO 2013 CONTRA LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL, AÍ COMO PARA QUE SOLICITEN A LOS TITULARES DE LAS SECRETARÍAS DE SALUD RESPECTIVAS A TRABAJAR DE MANERA COORDINADA CON EL GOBIERNO FEDERAL, EN LOS 3 EJES RECTORES DE LA POLÍTICA NACIONAL DE SALUD.

SENADO DE LA REPÚBLICA
LXII LEGISLATURA

Los que suscriben Senadores MARÍA ELENA BARRERA TAPIA, MIGUEL ROMO MEDINA, CRISTINA DÍAZ SALAZAR, HILDA ESTELA FLORES ESCALERA Y ARMANDO NEYRA CHÁVEZ, integrantes de la Comisión de Salud en el Senado de la República, de conformidad con lo establecido en los artículos 8 fracción II y 276 del Reglamento del Senado de la República, someten a la consideración del Pleno del Senado de la República, la siguiente PROPOSICIÓN CON PUNTO DE ACUERDO POR EL QUE SE EXHORTA RESPETUOSAMENTE A LOS GOBIERNOS ESTATALES A TRABAJAR DE MANERA COORDINADA CON EL GOBIERNO FEDERAL EN EL AÑO 2013 CONTRA LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL, DENTRO DEL MARCO DEL DÍA MUNDIAL DE LA SALUD; ASIMISMO, SE EXHORTA RESPETUOSAMENTE A LOS GOBIERNOS ESTATALES PARA QUE SOLICITEN A LOS TITULARES DE LAS SECRETARÍAS DE SALUD RESPECTIVAS A TRABAJAR DE MANERA COORDINADA CON EL GOBIERNO FEDERAL, EN LOS 3 EJES RECTORES DE LA POLÍTICA NACIONAL DE SALUD, con base en la siguiente:

EXPOSICION DE MOTIVOS

Las sociedades modernas, llegan a forman una nación fuerte y plena, capaz de desarrollar todo su potencial, gracias al resultado de sistemas de salud pública eficientes. Las evidencias prueban que dichas sociedades cuentan con mecanismos sofisticados para el cuidado, prevención y financiamiento de la salud pública entre sus ciudadanos.

Cada país y cada gobierno nacional, debe asumir su responsabilidad en el cuidado y atención de la salud de la población. Las Naciones Unidas iniciaron la celebración del “Día Mundial de la Salud”, el 7 abril de 1950, ocasión que se aprovecha para reflexionar sobre los desafíos que enfrenta la humanidad en esta materia fundamental.

En salud, las enfermedades crónicas no transmisibles, la obesidad, las adicciones, los accidentes, lesiones y violencia, las discapacidades y los problemas de salud mental, constituyen algunos de los retos más relevantes.

Por ello, la celebración en 2013 hace énfasis en una de las enfermedades más devastadoras de los últimos años, llamada por muchos expertos como la epidemia silenciosa del siglo XXI, la “Hipertensión Arterial”.

Según la OMS, este mal causa la muerte de 9.4 millones de personas al año y afecta a uno de cada tres adultos a nivel mundial. En América Latina y el Caribe, la hipertensión es el segundo mayor factor de riesgo de enfermedades cardiacas después de la obesidad, en todo el mundo el 40% de los adultos de más de 25 años padece hipertensión.

Finalmente, una de cada tres personas con hipertensión desconoce que tiene esta enfermedad.

En el mundo, las enfermedades cardiovasculares constituyen un importante problema de salud pública. En México, las enfermedades del corazón han ocupado el primer lugar como causa de defunción: en el año 2000 ocurrieron poco más de 68 mil muertes y se estima que el 2012, la cifra ascienda a más de 105 mil.

Estudios realizados en nuestro país muestran de manera consistente un incremento en la prevalencia de la hipertensión arterial, dislipidemias, diabetes, sobrepeso y obesidad, siendo precisamente la hipertensión arterial uno de los factores de riesgo más importantes para la enfermedad cardiovascular.

La Encuesta Nacional de Salud 2012 muestra que la prevalencia de la hipertensión arterial se ha mantenido prácticamente sin cambios en los últimos 6 años,  siendo del 31% en la población adulta de mayores de 20 años. Esta cifra se incrementa cuando se asocia a la obesidad (42%) y aún más,  cuando se asocia a diabetes mellitus (65%). 

En la encuesta también se pudo observar que del 100% de adultos hipertensos 47.3% desconocía que padecía hipertensión arterial.

No obstante los avances en el tratamiento y manejo de la hipertensión, las complicaciones se siguen presentando y representan para el Sistema Nacional de Salud costos muy elevados, y para la sociedad, los enfermos y sus familias, una reducción de las capacidades productivas, elevados costos laborales, y problemas psicológicos individuales y familiares.

Ante este panorama una política pública eficaz en salud debería considerar de manera fundamental hacer de la prevención de las enfermedades y de la promoción de la salud una prioridad. 

De la mayor importancia es la participación de la sociedad, ya que solo así, habrá de  reducir los factores de riesgo asociados y lograr intervenciones más oportunas y efectivas.

En México, gracias al esfuerzo institucional de varias décadas, se han alcanzado logros importantes en el sector salud. Hoy, la nación cuenta con profesionales preparados y especializados; con científicos e investigadores dedicados a combatir y prevenir la enfermedad, así como con sólidas instituciones de protección a la salud.

Así, se ha logrado controlar las enfermedades prevenibles por vacunación, como el sarampión y la difteria; y se ha erradicado la poliomielitis del territorio nacional.

A pesar de ello, se debe reconocer, también, que México vive una situación compleja en materia de Salud Pública. La fragmentación del sector; el uso ineficiente de recursos y la saturación de los servicios, afectan la oportunidad y calidad de la atención médica.

Además, el cambio epidemiológico por el que se está transitando, representa un reto adicional para nuestro sistema de salud. México, aún enfrenta retos típicos de países en desarrollo, como la persistencia de enfermedades infectocontagiosas y altos índices de mortalidad materna e infantil.

Al mismo tiempo, hay una mayor incidencia de enfermedades crónicas no transmisibles, como el cáncer, la diabetes y la hipertensión, propias de los países desarrollados. Esta doble condición obliga a actuar de inmediato.

Los diferentes niveles de Gobierno deberán actuar de manera coordinada para alcanzar implementar una estrategia enfocada a prevenir las enfermedades, promover la salud y procurar el bienestar de las familias mexicanas.

En ocasión del Día Mundial de la Salud 2013, el Gobierno Federal, a través del Ejecutivo, presentó la estrategia nacional de política de salud de los próximos 6 años.

La estrategia se divide en tres grandes ejes. Primero: Acceso Efectivo. El Estado debe asegurar los servicios de salud a toda la población, independientemente de su nivel socioeconómico o su condición laboral.

Además, se debe trabajar hacia la portabilidad y convergencia de los servicios de salud. Para lograrlo, se pretende fortalecer la rectoría y autoridad de la Secretaría de Salud, como responsable de la política nacional en la materia. Finalmente, asegurar una coordinación efectiva de las acciones, programas y esfuerzos de los actores que conforman el Sistema Nacional de Salud.

Segunda prioridad: Calidad en el Servicio. Se busca que por igual, se cuente con médicos, profesionales calificados e instalaciones para recibir un servicio de salud de calidad, así como seguir ampliando y modernizando la infraestructura hospitalaria y, en particular, trabajar para que las comunidades aisladas cuenten con personal médico capacitado.

Y finalmente, la tercera prioridad: Prevención. Se debe anticipar a la enfermedad y evitar las condiciones que la generan, ese es el ideal de la mejor forma de cuidar la salud.

En este aspecto, la estrategia planteada buscaría continuar con el esfuerzo de vacunación nacional. En congruencia con los Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU, debemos lograr una reducción significativa de las tasas de mortalidad materna e infantil.

Lo anterior, llevará a construir un modelo de atención primaria homologado y enfocado a la prevención de enfermedades.

En este sentido, una de las acciones más importantes de prevención, será la dirigida a reducir la obesidad y sobrepeso, toda vez que se han convertido en las más grandes amenazas para la salud de los mexicanos. Se busca poner en marcha una Estrategia Nacional para la Prevención y Control de la Obesidad y la Diabetes.

Esta estrategia incluye el fomento de estilos de vida y hábitos de alimentación saludables; la generación y rescate de espacios para la actividad física; la capacitación del personal de salud; y el fortalecimiento de la atención primaria.

En este esfuerzo, deberá involucrarse el sector educativo y promoverse la participación de la iniciativa privada, las organizaciones de la sociedad civil y la sociedad en su conjunto. Las acciones gubernamentales son importantes, pero sin el autocuidado de los mexicanos, nunca serán suficientes.

Todo lo anterior sentaría las bases para cimentar un Sistema de Seguridad Social Universal que proteja a las familias del país.

Además es prioritario garantizar la  calidad como producto del reordenamiento y del  reforzamiento de la regulación de los establecimientos de atención médica en el ámbito público y privado y la participación que corresponda de la autoridad sanitaria en los ámbitos federal y estatal.  Los mexicanos requieren  contar con servicios de calidad uniforme a lo largo y ancho de nuestro país, disponibles y con cada vez mayor capacidad resolutiva local.

Por otro lado, la lógica de continuidad de las  políticas públicas en salud,  nos encamina a una nueva Reforma Sanitaria que atienda  las justas demandas y necesidades de nuestra población, situación que exige el acceso efectivo a los servicios de salud con  calidad, como elemento central.

La gran contribución del Sistema Nacional de Salud para lograr un México incluyente y próspero, y transformarlo en una sociedad de derechos acorde a la política establecida por el Presidente de la República, se concretará cuando todos los mexicanos, sin importar su condición laboral, lugar de residencia, preferencia política, género o edad,  tengan pleno acceso a servicios de salud, con resultados favorables y medibles en su nivel salud.

Para lograr la universalidad de los servicios de salud, será necesario reforzar la rectoría de la Secretaría de Salud, promover la separación de funciones entre el  financiamiento y la prestación de los servicios, lograr una articulación plena de todos los actores a través de la adecuada coordinación y gestión de los recursos disponibles, trabajar unidos (todos los involucrados) en el Sistema Nacional de Salud bajo un modelo único, homologado y con la operación de redes de servicios de atención plurales y escalonadas, tanto públicas como  privadas.

Uno de los elementos fundamentales, para alcanzar la universalidad de los servicios de salud, será la transformación y unificación de los mecanismos de financiamiento público de la atención médica, rompiendo con la segmentación artificial por grupos de población que es la original y principal fuente de inequidad del sistema, tanto en financiamiento como de acceso a los servicios; lo que permitirá garantizar el uso ordenado de los recursos disponibles y la necesaria rendición de cuentas.

La prestación de los servicios de salud también debe garantizar las acciones de salud pública, muchas de ellas de atención primaria a la salud y de acción comunitaria, las cuales son aplicadas desde el ámbito local, junto con las acciones preventivas y de promoción de la salud, lo que permitirá lograr de una mejor manera la reducción de  riesgos a la salud  y las acciones que en materia de salubridad general es obligación del Estado Mexicano atender.

En atención a lo anteriormente expuesto, la Senadora de la República que suscribe pone a consideración del Pleno de ésta honorable soberanía el presente:

PUNTO DE ACUERDO

PRIMERO.- El Senado de la República del H. Congreso de la Unión exhorta respetuosamente a los Gobiernos Estatales a trabajar de manera coordinada con el Gobierno Federal en el año 2013 contra la hipertensión, dentro del marco del Día Mundial de la Salud.

SEGUNDO.- El Senado de la República del H. Congreso de la Unión exhorta respetuosamente a los Gobiernos Estatales para que soliciten a los Titulares de las Secretarías de Salud respectivas, a trabajar de manera coordinada con el Gobierno Federal, en los 3 ejes rectores de la Política Nacional de Salud.

Dado en el recinto del Senado de la República, a los ocho días del mes de abril del año dos mil trece.

SENADORES

MARÍA ELENA BARRERA TAPIA

MIGUEL ROMO MEDINA                                 CRISTINA DÍAZ SALAZAR

HILDA ESTELA FLORES ESCALERA                      ARMANDO NEYRA CHÁVEZ