Conferencia de prensa de la senadora Lucero Saldaña Pérez, sobre la violencia contra las mujeres.
21 de noviembre de 2012.
Gracias por su presencia.
Vamos a abordar un tema importante y relevante, que es la violencia hacia las mujeres.
En relación a este día 25 de noviembre, que viene con 16 días de activismo en torno a los derechos humanos, que inicia con el Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres, a nivel mundial.
¿De qué violencia estaríamos hablando, cuando escuchamos frases no tan celebres de diversas personalidades en diferentes ámbitos del territorio, denigrando verbalmente la condición y situación de las mujeres?
La violencia ya está tipificada en el marco de las leyes, en la Ley de Acceso de las Mujeres y Niñas a una Vida sin Violencia. Y tenemos el marco también de la Ley de Igualdad, de la cual soy autora.
Casos de agresiones verbales que hemos escuchado, como el de la alcaldesa de Lerdo, Durango, Rosario Castro Lozano, al ser llamada por el diputado Carlos Aguilera “burra alborotada”; o el de la diputada Violeta Dávila, del Congreso de Coahuila, al ser comparada con una “serpiente enroscada de lengua viperina”; o por el diputado Alfredo Habib, o el de la regidora Margarita del Río, en la reunión del Cabildo de Torreón, al ser llamada por el regidor Elías Ganem “vieja sesentona”.
Incluso, recientemente –un alto funcionario de gobierno-- la declaración del Gobernador Mario López Valdez, de Sinaloa, al declarar que “las mujeres deben portarse bien”, cuando es cuestionado por la violencia feminicida; es decir, el asesinato de las mujeres, particularmente en estados fronterizos, y sobre el avance en el caso Perla Lizet.
¿Cuántas más cotidianamente vemos violados los derechos políticos, económicos, sociales, culturales, patrimoniales? El derecho de las mujeres a vivir una vida libre de violencia y no discriminación, ya está establecido tanto a nivel nacional como internacional en diferentes ordenamientos; entonces, sí hay avances en la ley, pero culturalmente lo que sigue persistiendo es la estructura de dominio jerárquico, en donde --desde las familias-- necesitamos impulsar medidas y acciones.
Por eso presentamos desde la semana pasada la Iniciativa que define el ámbito político, en el ámbito público ya está en la Ley de Acceso el ámbito familiar, el ámbito institucional, el ámbito laboral, que habla de no violencia, no discriminación, pero en el ámbito político faltaba un capítulo.
Esa fue la presentación que su servidora hizo. Pertenezco al Partido revolucionario Institucional desde hace más de 30 años, he sido fundadora del Instituto de la Mujer en Puebla, antes de que existiera a nivel nacional y autora de la Ley de Igualdad; entonces, con toda experiencia práctica y académica me permití presentar esta Iniciativa, a la que se adhirieron varios partidos, de mi partido varias compañeras y compañeros, de otros, recuerdo a Angélica de la Peña, del PRD, y Ana Gabriela Guevara, del PT.
¿Qué significa? Reconocer que existe la violencia y definirla. Cerraría diciéndoles que además de modificar la Ley de Acceso, también --en sanción-- modifico el COFIPE --esa es la propuesta--, para que quede incluida en el tema de sanciones lo que es la definición de violencia política de género, ese es el concepto, pero es la violencia contra las mujeres en el ámbito político, entonces quedaría definido este tipo de violencia respaldada con la “Convención Belém Do Pará”, de la CEDAW misma, que es la acción concentrada para eliminar la violencia contra las mujeres basado en su género y condena todas las formas de violencia perpetradas incluso por el Estado o sus agentes.
Hay estados que han avanzado en tener leyes locales, pero no todos manejan los mismos porcentajes en cuotas, ni los mismos delitos, por eso es importante que a nivel federal dejemos asentado un mensaje de que en el ámbito público, no se permita por cuestiones de género este tipo de violencia que pueden impedir el ejercicio de nuestras funciones, de llegar a acceder como las “juanitas”, recuerdan el término, todo esto que se ha generado como algo de costumbre, que se cobija, que ya hay un rechazo social en contra de ello, pues que tenga también un marco legal.
Proponemos en el ámbito de género --que estamos hablando de un sistema de la igualdad-- fortalecer estos avances que se han tenido y que haya una presencia sustancial relevante; ya la hay en el Congreso, ya hay más diputadas y senadoras, de 128 somos 43, 37 por ciento, históricamente el porcentaje más alto, pero que no solamente sea en cantidad, sino en calidad de propuestas, de resultados. Y auguramos que habrá tiempos favorables para la incursión de más mujeres en la administración pública federal y que así baje a lo local, porque en las presidencias municipales apenas tenemos un 6 por ciento.
Entonces necesitamos visibilidad de mujeres, que ya no es cuestionable su capacidad. Ya hemos avanzado en algunos terrenos, pero necesitamos garantías en las leyes y la voluntad política para abrir más espacios en próximas administraciones, en el gabinete del próximo gobierno.
Estoy a sus órdenes por si hay algún comentario o pregunta.
PREGUNTAS Y RESPUESTAS
PREGUNTA: ¿Este fenómeno se da todavía más en los estados, en los municipios o también en las ciudades, el llamar o calificar a las mujeres como de lenguas viperinas y todo esto?
La otra, esto de la modificación al COFIPE ¿qué sanción real tendría alguien que, no sé, en una contienda electoral denoste así a una mujer, cuál podría ser su sanción? que me diera un ejemplo.
RESPUESTA: Sucede en todos los países, en el ámbito urbano y rural; no hay país que trate igual a las mujeres, estamos hablando de igualdad en la diferencia.
Ser diferentes biológica y físicamente, no significa que haya injusticias y desigualdades sociales, políticas, económicas, culturales, que se reflejen en indicadores de pobreza y de enfermedades que pueden ser prevenibles en diferentes rubros.
Entonces es transversal, condición política, nivel educativo; sucede en Italia, recuerdan cuando Berlusconi, igualmente.
Lo que se trata es reconocer, decir que no nos gusta que se siga manejando una cultura de desprecio o menosprecio a las mujeres, cuando somos más del 50 por ciento de la población, cuando somos más del 50 por ciento del electorado y cuando el próximo año –apenas-- cumpliremos 60 años en México de tener derecho al voto. Una ciudadanía parcial cuando no se tiene el acceso.
El licenciado Mario López Valdez (Malova), que nos está diciendo: “pórtense bien para que no las asesinen”. Bueno, creo que aquí hay que no solamente señalar, denunciar, sino que haya sanción.
Precisamente en el COFIPE estamos hablando de, se sanciona cuando los partidos políticos, cuando las instituciones, cuando los medios de comunicación también, incurren en acciones o medidas que tengan que ver con esta violencia en el ámbito político o público hacia las mujeres.
Aquí la sanción va de diversas maneras, como está establecido en el COFIPE: la disculpa, reconvenir, sanción administrativa, sanción económica; hay una gama de sanciones, que va precisamente a ese nivel en el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales a nivel nacional.
Ojalá que esto baje a los estados, porque es en todas partes. Ya vimos ejemplos locales y aquí también hay ejemplos como en el Distrito Federal, las “juanitas”, en fin, hay casos cotidianamente todos los días.
PREGUNTA: Según nos refiere, la violencia contra las mujeres va desde los insultos más machistas que se puedan escuchar, por parte incluso de personalidades como gobernadores, hasta los feminicidios, pero en concreto ¿qué se va a hacer para acabar con esta violencia en esta Legislatura, de su parte?
Y pues ya entrados en gastos ¿cuántas mujeres prevé que formen parte del gabinete de Enrique Peña Nieto?
RESPUESTA: Primeramente, año con año, en estas fechas, del 25 de noviembre al 10 de diciembre, todo el mundo tiene 16 días de activismo, que comprende campañas y sensibilidad.
No sé si recuerdan que hombres también han participado en decir que ser hombre no significa usar la fuerza física o el control.
Entonces aquí las leyes son importantes, pero más que un piso digno --que serían las leyes--, queremos techos que apuntalen hacia arriba, hacia los techos, y ahí está en que hombres y mujeres seamos sensibles a esta realidad.
Que haya más mujeres en el gabinete del Presidente electo, va a ser un mensaje importante de reconocer capacidades, habilidades y trayectorias de hombres o mujeres --indistintamente--, por el interés de inclusión sin estereotipos, sin prejuicios, sin discriminación.
Hoy no tenemos ninguna gobernadora, por ejemplo. Hay déficit en las presidencias municipales, que es donde se manejan recursos locales y se tiene más cercanía con la sociedad, y que ojalá que los programas sociales por el hecho de que estamos hoy más mujeres en el Congreso, signifique que estemos proponiendo temas de interés y que hoy las nuevas generaciones nos apoyan.
Hay muchos jóvenes que dicen por qué no podían votar, no puedo concebir cuál era la causa.
Entonces, si esto es más cultural, requerimos que al haber más mujeres, signifique un nivel de aspiración de muchas niñas y jóvenes que puedan ocupar cargos relevantes en la administración.
Eso refleja lo aspiracional, pero también el compromiso y sentido social en nuestra condición de mujer.
Proponer sistemas para a igualdad, guarderías, espacios de lactancia, en fin, cuestiones que como mujeres hemos vivido en cuerpo de mujer, pero que asumimos la responsabilidad al mismo nivel, con las capacidades que todo país necesita. Esa es la importancia.
El mensaje es no discriminar, no violencia e igualdad de resultados, porque las oportunidades es el inicio, pero los resultados que es la igualdad real, la igual en los hechos, la igualdad de jure está en las leyes.
Ahora, lo que queremos avanzar es en la igualdad en los resultados, en la realidad social, cultural, económica, política, en todos los ámbitos.
PREGUNTA: Para consultarle su opinión sobre esta propuesta que envió, a través de los legisladores del PRI y del Verde, el Presidente electo, Enrique Peña Nieto, para transformar la administración pública federal.
Se plantea la eliminación o la desaparición del Instituto de las Mujeres, y que esa área pase a formar parte de la Secretaría de Desarrollo Social.
Entiendo que ha generado inquietud en la sociedad civil. Usted que trabaja en este tema, quisiera conocer su opinión.
RESPUESTA: Qué bueno que nos hace esta pregunta, porque efectivamente hay la interpretación de que va a desaparecer el Instituto Nacional de las Mujeres.
Institucionalizar políticas de igualdad, ha costado mucho trabajo. Hay avances en México, nada menos que tuvimos la primera Conferencia Mundial en 1975, y en el 74 se dio la reforma al Cuarto Constitucional, donde establece: hombres y mujeres son iguales ante la Ley.
Estamos hablando que a nivel internacional nuestro país se ha comprometido con estos temas, en Beijing, en el 95; de ese entonces a la fecha, en México se estableció la Coordinación del Programa Nacional de las Mujeres. La primera Coordinadora fue Dulce María Sauri, que con esa voluntad, conocimiento y experiencia --además de haber gobernadora también--, es la iniciadora precisamente en Gobernación.
Pero se quedaba en nivel de tercero, cuarto nivel, por ahí, dentro de la Subsecretaría de Migración, Población.
Después, quiero comentarles --porque la historia dice-- que ustedes piensan que el Instituto Nacional de las Mujeres fue iniciativa del presidente Fox, no.
El antecedente es que son institutos locales. El primero fue en Quinta Roo, en el 90; en el 91 fue Puebla, fundadora su servidora; después vino Colima, posterior, y hasta los dos años y medio a nivel nacional por decreto del Congreso. Entonces fue por el Congreso que se crea el Instituto Nacional de las Mujeres.
Con todos estos avances y la Ley de Igualdad --de la cual también les refiero la autoría--, crea un programa nacional para la igualdad, un sistema nacional que transversaliza, y que es lo más importante.
El debate no está, no debería ser la instancia. Tiene también un buen antecedente –en el estado de Guerrero--, pero sus resultados no han sido tan exitosos de una secretaría en Guerrero desde los años 90, por ahí, antes, empieza la secretaría en Guerrero, pero se le encomienda solo a una secretaría.
Aquí estamos hablando de transversalización, que en todas las áreas, en todos los procesos, desde la planeación, el diseño de la política pública, su aplicación, los recursos, los presupuestos, la evaluación, rendición de cuentas, en todas las instancias, en todos los órdenes y niveles, haya este sistema de igualdad, eso es lo fundamental.
¿Cuál es esta iniciativa del Presidente electo, Peña Nieto? Lo que transfiere es el tema, no la eliminación del Instituto de las Mujeres.
El Instituto tiene su propia Ley, es un organismo descentralizado, con personalidad jurídica propia, con presupuesto propio, y lo que pasa es que antes estaba en Gobernación; de alguna manera las instancias paraestatales que incluyen las descentralizadas, tienen sus propios ordenamientos y su vida propia, pero pueden estar sectorizados de conformidad con alguno, y como ahí se creó la coordinación, ahí quedó.
Si en toda esta propuesta lo que se traslada es el tema de las mujeres, no sería apéndice, no sería grupo vulnerable, sino simplemente que adicionalmente la Secretaría de Desarrollo Social también fortalecería el tema de mujeres, así niños, adolescentes; así indígenas, discapacitados, en fin.
Lo que tenemos que ver, es que estamos abiertos a la discusión, que hoy se está teniendo una reunión similar a esta con personalidades de distintos partidos, de distintas instancias, academia, sociedad civil con el grupo de transición para responder a estos interrogatorios.
Entonces hay la interpretación de que si desaparece o no el instituto. No desaparece. El Instituto Nacional de las Mujeres ha sido también una conquista, que repito, no es de un Presidente, sino del Congreso, y que sus orígenes están en los estados. Y les refiero como testimonio propio, esta es la real historia y estaremos defendiendo que sigamos dando la importancia a estos temas.
Lo importante es el sistema para la igualdad, que se lleve a cabo. Y que tengamos en los resultados, ahí en esos casos, no observando a las mujeres como grupos vulnerables o con una política asistencial, sino con una visión de derechos humanos, con el avance que ya tenemos. Ese es el interés.
PREGUNTA: Sólo para aclarar, no desaparece ¿solamente pasa de ser sectorizado de Gobernación a sectorizado de SEDESOL?
RESPUESTA: De alguna manera está considerado dentro del sector, pero con su vida propia, efectivamente; o sea, no se disminuye su atribución de autonomía y al contrario, creo que si hay el interés también de que los programas sociales tengan el tema adicionalmente al Instituto.
¿Qué sucede en otros países? Existe la figura de instituto o ministerio o secretaría, y también está instancias sectorizadas o el tema sectorizado en economía, en desarrollo social. Canadá –acabo de estar con la Embajadora de Canadá y me refiere lo mismo-, ahí hablan de un ministerio, pero no es la súper secretaría, porque saben que se le encerraría sólo a una dependencia el tema que corresponde a toda la población en todas las edades, niñas, jóvenes, adolescentes, mujeres.
Entonces aquí es un enfoque de género trasversal en la política pública, eso es lo que hay que continuar; ese es el reto, la aplicación, los mecanismos de los marcos legales que ya tenemos, a seguir instrumentando esta política pública.
Hay que seguir avanzando en esto, en el espacio, en la casa donde quieran que se habite, en el sector, en el área, hay que seguir avanzando, profundizando.
Sentimos que hubo una reacción importante pensando en que desaparecería. No desaparece el Instituto, esa es la respuesta, eso es en lo que vamos a estar pendientes y que seguiremos avanzando en estos temas en los distintos espacios, y refiero, ojalá se siga avanzando más hacia lo local.
PREGUNTA: Sin embargo sí sería un cambio el que esté sectorizada a Gobernación, sobre todo precisamente como va a ser ahora, una súper secretaría, la de Gobernación, a mandarlo a SEDESOL, donde está precisamente toda la población digamos en cierta desventaja.
¿Este cambio por qué se da, si las mujeres no precisamente estamos en esa desventaja, somos la mitad de la población, entonces por qué ese cambio y se le quita a la principal dependencia? En donde además las categorías salariales son más altas en Gobernación que en muchas otras dependencias del sector público ¿entonces a qué se debe esto?
RESPUESTA: Mucho se ha cuestionado si va a depender directamente de Presidencia, que si el Instituto tiene su Ley Administrativa, que es su Ley del Instituto; está la Ley de Igualdad, está la Ley para las paraestatales, está la Ley de Hacienda, y Hacienda lo ve como un ente descentralizado autónomo, o sea, si tiene autonomía ya nada más si el debate es el cambio de lugar, cuando su esencia no cambia.
Aquí podemos estar abiertos a que si la evolución sigue dándose o no hacia otros niveles. Lo importante es que en esta iniciativa que se presenta en la Cámara de Diputados se está discutiendo el día de hoy y tenemos precisamente el interés, uno, de que no va a desaparecer el Instituto, que va a continuar con su apoyo presupuestal, con su autonomía. Y que en SEDESOL es transferible el tema, no que el Instituto desaparezca, sino simplemente se transfiera el tema a lo que será una política social de derechos.
Así lo ha visto Peña desde su campaña, se ha comprometido a ser un gobierno con perspectiva y sensibilidad social de respeto a los derechos.
Muchas gracias.